martes, 14 de octubre de 2008

Franquismo a la peruana



A vista y paciencia de todos -y con una buena recaudación taquillera, hay que mencionarlo- se exhibe en nuestras salas la película (es una forma de decir) Vidas paralelas. Empresa financiada y orquestada por nuestro invicto Ejército (también es una forma de decirlo) con lo cual se cumple un sueño largamente acariciado por el general Edwyn Donayre (que, además de Comandante General del Ejército, aprovecha cada momento mediático para exhibir sus dotes de comediante): Que aparezca ante el gran público la versión de los militares sobre lo que ellos denominan -con bastante eufemismo- "la pacificación del Perú".

Antes del estreno las críticas aparecieron por doquier en la blogósfera (aquí, acá y acullá incluso) haciendo hincapié en la figura de una película sobre nuestra guerra interna financiada por uno de los bandos, lo que ponía en bastante tela de juicio su objetividad, por no decir la abierta contradicción ejercida por el Comandante General del Ejército de financiar su película, pero silenciar otras interpretaciones artísticas sobre nuestro conflicto. Ah, y más dudas: ¿La versión del Ejército tendrá que ser la versión del Estado, ya que esta película ha sido financiada con la plata de todos los peruanos? ¿Y acaso no es el colmo que haya dinero fresco para que el Ejército ruede su film propagandístico mientras CONACINE se vuelve cada día más rácana e indolente a la hora de finaciar producciones peruanas independientes?

Bueno, como si fuera poco, el (tele)film contiene un componente tremendamente nocivo. Como lo indica el conocido abogado y activista de DDHH Wilfredo Ardito "La trama muestra cómo un heroico militar es condenado injustamente por haber matado a una terrorista, que en realidad, se había fugado, asumiendo que los millares de desaparecidos ocurridos en el Perú eran senderistas fugitivos".

Del resto de la película queda destacar el inequívoco espíritu franquista de la iniciativa. Hace más de medio siglo, terminada la Guerra Civil española, el general Francisco Franco creyó necesaria dar la versión oficial de lo que él consideró un Cruzada de Liberación. Para tal fin pergreñó un guión maniqueísta y patriotero que el director Sáenz de Heredia montó salvando las partes más infilmables del mismo. El resultado fue Raza, arquetipo del cine militarista que eleva el uniforme por encima casi de todas las cosas y coloca a las Fuerzas Armadas como lo que supuestamente han sido, como lo que tienen que ser y como lo que serán inexorablemente por la gracia de Dios: Instituciones tutelares de la nación. Para quien crea que exagero, podéis descargar la película aquí. Se recomienda tener el estómago sano y vigoroso.

Nuestra versión criolla es menos estridente pero igual de hilarante. Desde un misscasting fenomenal al colocar a Renzo Schuller como mando militar "senderista" en el corazón de los Andes (¿Será porque fue naricita roja?) hasta la descarada desinformación histórica de los hechos (Una columna guerrillera entra a un pueblo al grito de "¡somos de Sendero Luminoso y hemos venido por una contribución revolucionaria!"), pasando por el ideólogo malo-malo, todo un Fu Man Chú de los Andes, que contamina a los jóvenes ingenuos (cuya imagen es la de un sosias de Abimael Guzmán, como para que no queden dudas) y rematado por un imposible triángulo amoroso (Jimena Lindo, como la "Camarada Bertha", haciendo de guerrillera femme fatale, total, todas las rojas son putas ¿no?).

Y quien crea que me estoy regodeando en esta bazofia audiovisual, me curo en salud ofreciéndoles la versión de un crítico de cine más alturado y respetable como Gabriel Quispe. Comparen nomás.

Hace exactamente veinte años, el conocido cineasta peruano Francisco Lombardi rodó La boca del lobo y, pese a que era una película bastante crítica con el estamento militar (se ve como los soldados ametrallan sin piedad a los campesinos arrestados injustamente), no faltaron airadas voces que se quejaron de la interpretación excesivamente psicologista que el director hacía de la masacre (inspirada en el genocidio de Soccos). Bueno, hoy se exhibe una película con una versión por demás parcial, que convierte al Ejército en una pléyade de hérores sin mácula, entiende el problema de la subversión como el envenenamiento ideológico de un profesor resentido e insinúa abiertamente que las violaciones de los DDHH son poco más que embustes para proteger terrucos. Y no pasa nada. Ninguna protesta. Silencio...
La única excepción, como parece ya ser la regla, está en los blogs. La crítica de Ybarra, por ejemplo, es implacable. No encontraréis nada parecido en los periódicos o en la tele.

Bueno, es señal de los tiempos que corren. Hay una impunidad casi orwelliana en la cual se miente y se insulta cotidianamente en todas las pantallas y emisoras. A esto contribuye también el silencioso pero progresivo descrédito de la Comisión de la Verdad, convertida tristemente y malgré eux en un círculo de intelectuales pitucos que pontifican sobre el conflicto armado interno a espaldas de la sensibilidad popular (esa es la versión que da otra película peruana, El Rincón de los Inocentes de Palito Ortega). Frente a la versión parcial que imponen las FFAA, la Iglesia y el empresariado nacional, casi no hay voces discordantes. Juegan solos en la cancha y todos tenemos que soportar cómo festejan sus goles.

Raza fue un éxito de masas en su tiempo entre otras porque el Régimen la había clasificado de "Interés Nacional" y su visionado fue casi obligatorio durante los duros años cuarenta. Luego, con el paso de los años, la película fue perdiendo interés y hoy es apenas vista como una rareza. El destino de Vidas paralelas no llegará ni siquiera a eso.

Ahora bien, en el futuro, cuando alguno de nuestros hijos la vea y se sorprenda del contenido, es muy posible que nos pregunte: ¿Y cómo permitieron que el dinero de un país pobre se gastara en esa sarta de mentiras?¿Es que nadie se opuso a ese bodrio? ¿Aguantaron calladitos que esas mentiras se pasaran abiertamente en las carteleras de Lima?

Bueno ¿Qué le responderemos a nuestros hijos? ¿Que estábamos ocupados en el caso de Magaly Medina?

Y para que no se gasten sus doce soles en esa h..., acá tienen el trailer de la película de marras. avisados quedan.



P.D. A quien le interese la cultura bajo el franquismo (sacando lecciones) puede pasarse por aquí . Y aquí tenéis un excepcional ensayo sobre el arte moderno bajo Franco. Cualquier semejanza con nuestra realidad... pues que no, no es mera coincidencia.


9 comentarios:

carbon y piedra dijo...

Excelente Javier muy buen articulo.Nuestro pais empieza a construir sus mitos errados tambien.
saludos

Anónimo dijo...

Como dice en tu articulo, hay dos elementos interesantes. La propaganda como tal (la mentira historica), y lo otro es como se puede usar fondos publicos (Asumiendo que el hilo o canla conductor fue la U Alas Peruanas) para un asunto asi.

Pero al mismo tiempo, es interesante ver de cerca el sufrimiento de las familias de los militares, que tambien fueron victimas del terrorismo de Sendero luminoso. Porque no todos los militares (tal vez incluso la mayoria de ellos) no actuaron asi.

Anónimo dijo...

En La Primera y Peru21 tambien se han publicado criticas nada complacientes para con Vidas paralelas.

José F dijo...

Y no olvides la película que mandó Franco hacer conmemorando los 25 años de "paz" y "orden" gracias a él: "Franco, ese hombre"

Un saludo

RODOLFO YBARRA dijo...

Javier: hay un personaje que se nos había pasado de largo, y es el que funge de alcalde (al principio de la película sale con poncho, y al final sale vestido de forma citadina) quien es -nada más y nada menos- el congresista aprista en actividad: Edgar Núñez,
quien ahora quiere amnistiar a todos los policías y militares que han asesinado a pueblos enteros y sembrado fosas comunes que hasta el día de hoy se descubren para el asombro nuestro y de la comunidad mundial (ver noticias de los periódicos hoy lunes 20/10/2008).

Pego -con asco- la noticia de "Cineencuentro":

Una de las curiosidades de Vidas paralelas, la opera prima de Rocío Lladó, es la aparición del legislador aprista Edgar Núñez, en el rol de alcalde del distrito ayacuchano de Villa Canaria, que es el lugar donde ocurren los principales hechos de la historia sobre los adolescentes que se separan en un episodio traumático y luego se convierten en enemigos extremos como senderista y militar del Ejército.

Núñez actúa en dos momentos. El primero puede pasar desapercibido, porque es breve y está con poncho y sombrero, no tiene planos cerrados y habla unos instantes en quechua, cuando Felipe, el personaje de Oscar López Arias, llega a esa localidad como autoridad militar y busca referencias para desempeñarse mejor en el cargo, identificando a los mandos senderistas y estrechando lazos con la población. El segundo es al final, ahora sí en encuadres que lo muestran claramente, cuando ofrece su testimonio a favor de Felipe en el juicio del que es objeto.

Como menciona El Comercio, Núñez se dio maña para improvisar un mensaje en la escena judicial, que en realidad no pasa de una anécdota personal y una actitud política extrafílmica, porque no aporta confundida ya entre diálogos similares que convierten toda esa secuencia en un despropósito. En todo caso, esta experiencia actoral tiene relación con su pasado, pues en los años 80, como alcalde del distrito de San Clemente, en Pisco, también estuvo en los planes violentos de Sendero, pero pudo contarlo. Ahora representante de Ica, es uno de los congresistas que más ha reclamado por la tardía reacción del gobierno ante el terremoto del 15 de agosto de 2007, y la inoperancia de los trabajos de reconstrucción de la región. Para que lo conozcan un poco más, es el actual presidente de la Comisión de Defensa Nacional y Orden Interno, que últimamente decidió investigar una vez más a la ONG Ideele, por presión de Luis Giampietri, uno de sus miembros.

Núñez se interesó en Vidas paralelas cuando la Universidad Alas Peruanas hizo una convocatoria, dirigida básicamente a estudiantes, para participar en la película, y al parecer ya le picó el bichito de ser actor y hasta guionista de cine. A ver, pues, que ayude en el Congreso para que Conacine reciba su presupuesto completo (si no, lo adoptamos).

Yapa en video: Este usuario de YouTube tiene varios clips tipo “making of” de Vidas paralelas.

Unknown dijo...

De la película, qué decir: MIERDA ABSOLUTA. De los auspiciadores o cómo se llamen, qué decir: BASURA APRISTA ESA PSEUDOUNIVERSIDAD LLAMADA ALAS PERUANAS, LUGAR EN DONDE LAS HIJAS/OS DE LOS CACHACOS VA A COMPRAR EL TÍTULO PROFESIONAL PARA LUEGO SALIR A ROBAR, A MATAR GENTE Y ANIMALES (TAMBIÉN ENSEÑAN VETERINARIA).

De los actorcillos qué decir: caca criolla aderezada por liberalismo y racismo y más liberalismo.

Del delincuente aprofujimontesinista Edgar Núñez, qué decir: esa basura aprista llamada Edgar Núñez estaba pedido en los ochenta. En San Clemente (Pisco) los pescadores camaroneros y los de mar lo sindican como UN CONOCIDO LADRÓN Y CORRUPTO que se benefició con ingentes cantidades de dinero amparándose en la cachaquería y el Poder Judicial.

Ahora paga esos favores a los apristas, a los fujimontesinistas y a su patrón Giampietri sacando ese proyecto de ley de IMPUNIDAD.

Giuliano Vecco

Anónimo dijo...

Un mes sin actualizar el blog. ¿Cómo celebramos?

Discursiva. Revista de Literatura y Humanidades dijo...

LOS INVITAMOS A LA CONVOCATORIA DE LA REVISTA DISCURSIVA Nº 3
1. Reflexión: artículos y ensayos
2. Creación: cuento y poesía.
3. Reseñas: libros publicados en el 2007 y 2008
4. Humor gráfico
. El tema para esta edición es Lo rural-urbano en la literatura peruana, el cual se limita a la sección de reflexión y humor.
. La fecha límite para los envíos: 31 de diciembre de 2008. . . La publicación de los resultados: el 18 de enero de 2009.
SALUDOS

Anónimo dijo...

¿Sabes què? Me gusta tu blog. Es interesante leerlo.
Pero no me gusta que tenga que ser tan vulgar y grosero en tu lenguaje

De ahì todo bien.

Tu comentario sobre lo chicha es buenazo

Sigue adelante